CRATERELLUS CORNUCOPIOIDES
Nombres populares:
Trompeta de la Muerte, Trompeta Negra, Trompeta, Rebozuelo Negro, Orella D’Ase, Trompeta de los Muertos, Trompetas de la muerte...
Características principales:
De color gris oscuro o negro, su clara forma de trompeta nos da una pista evidente de dónde proviene su nombre popular.
Es una seta, que a igual que el Cantharellus cibarius, o rebozuelo, difícilmente se pudre.
Hábitat:
La podemos encontrar tanto en primavera, como a mitad del invierno.
Suele aparecer de forma abundante, formando grupos, en las zonas más húmedas de los bosques.
Especialmente aparecerá cerca de alcornoques, encinas, robles; en general, bosques de planifolios.
Es muy frecuente localizarlas cerca de torrentes, los márgenes de estos; zonas a veces con un acceso más complicado para el buscador de setas. En ocasiones, las trompetas de la muerte podremos encontrarlas un poco escondidas entre la hiedra.
Comestibilidad:
La Trompeta de la Muerte, o Craterellus cornucopiodes, es una seta muy sabrosa.
Las trompetas de la muerte son muy aptas para ser desecadas: si las colocamos sobre papeles de periódico, en un lugar sin humedad, en pocos días ya estarán completamente desecadas.
A medida que se irán secando, notaremos como desprenden un aroma muy agradable y característico.
Después, las podemos conservar en botes de cristal, y sólo será necesario volver a hidratarlas, cuando las queramos cocinar.
Una vez secas, también pueden triturarse, y usar ese polvo resultante como un condimento.
Posibles Confusiones:
Es bastante parecida a la trompeta gris (Cantharellus Cinereus), que es también comestible.
Cantharellus Cinereus, trompeta gris.
La carne delgada y fibrosa de las Trompetas de la Muerte difícilmente se pudre.
Significado de los símbolos de comestibilidad:
Comestible
Sin especial interés culinario
ATENCIÓN: Requiere consideraciones especiales
PRECAUCIÓN: Tóxico / No comestible
NOTA IMPORTANTE:
No se arriesgue a comer setas sin verificar previamente al 100% de qué especie se trata y su posible comestibilidad.
No vale la pena poner en riesgo su salud y, en el peor de los casos, su vida, o la de los demás.
Es siempre recomendable, solicitar la ayuda de micólogos expertos, o bien, de las autoridades sanitarias pertinentes, La hora de determinar con seguridad la comestibilidad de cualquier seta, y nunca, repetimos, nunca, arriesgarse a comer una seta de lo que se nos tienen dudas.
PARA ELABORAR ESTA FICHA SE HAN CONSULTADO TAMBIÉN ESTAS OTRAS FUENTES Y ENLACES DE INTERÉS:
– Asociación Micológica Fungipedia
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